Aunque muchos pueblos de Catalunya escenifican La Pasión de Cristo (la vida, muerte y resurrección de Jesucristo), en dos localidades el acontecimiento moviliza una cantidad de recursos imponente. Son dos pueblos vecinos, Olesa de Montserrat y Esparraguera, los que dan unas cifras más que sorprendentes y dan también una idea de la enconada competición entre las dos villas.
La Pasión de Esparreguera es un espectáculo con una gran complejidad dramática y técnica, que consigue transmitir al espectador actual la esencia de unos personajes con dos mil años de historia. La grandiosidad del teatro, la gran cantidad de actores en escena, los vertiginosos cambios escenográficos, la perfecta unión del texto, y la música original interpretada en directo por una orquesta y una coral convierten La Pasión de Esparreguera en una producción teatral de características únicas.
Según el presidente de La Pasión de Esparreguera, Manel Roca, la representación “añade efectos visuales y trucajes similares a los grandes musicales o grandes producciones cinematográficas”. Aseguró que “se trata de un espectáculo que mezcla religión y tradición en una historia actual con traiciones, amor, sangre”, elementos que podrían encontrarse en “cualquier película”.
De su origen consta la existencia de una carta, fechada de 1611, donde unos vecinos de la villa de San Lorenzo de Hortons dirigen a unos familiares de Esparreguera anunciándoles que vendrán a la villa para ver las representaciones de La Pasión.
La versión actual del texto es una creación del artista Esparreguera Ramon Torruella Satorra, estrenada en 1960, que se mantiene fiel a los textos evangélicos y se adapta a la vez en nuestra realidad más inmediata.
Una orquesta, un coro y un órgano de setecientos tubos son los instrumentos que dan vida a la banda sonora de La Pasión de Esparreguera. Después de algunos años en que se interpretaron piezas de música clásica, 1976 estrenó el libro musical compuesto especialmente para La Pasión de Esparreguera del maestro José Borrás, hijo de la villa.
La Pasión ha sabido mantener a lo largo de los años su estructura original y se representa en 35 escenas divididas en dos partes: la primera parte por la mañana y la segunda por la tarde
El teatro, con un aforo de 1.747 espectadores, es considerado uno de los más grandes de Cataluña. Inaugurado en 1969, fue diseñado especialmente para representar La Pasión.
Esta estructura, poco frecuente en el teatro actual, convierte La Pasión de Esparreguera en una fiesta popular para disfrutar durante todo un día. Los espectadores están invitados a vivir una jornada teatral tan singular que seguro repetirán en más de una ocasión a lo largo de su vida.
Más de un millar de personas entre figurantes y equipos de mantenimiento, vestuario, maquillaje, sonido e iluminación, son el verdadero motor que da continuidad a esta herencia cultural. Sin olvidar el público fiel -más de 15.000 personas cada año- que ha convertido una historia, con final conocido, en el argumento teatral más representado de Cataluña.